Los mayas, aparte de tener una sociedad organizada y bien delimitada, tenían una forma de gobierno complejo, con el cual dominaban el pueblo de manera exitosa y tenían avances económicos, culturales y científicos bastante altos.
¿Cuál era el tipo de estado de los mayas? Los mayas nunca construyeron un estado unificado, por lo contrario, se conformaron por distintas ciudades independientes entre sí, donde su gobernante maya, el jefe máximo, tenía el poder parcial, debido a que era apoyado por un consejo de estado.
El gobierno estaba directamente relacionado con las deidades: quien tenía el poder no era la persona más capacitada, pero sí la que se consideraba descendiente de los dioses. Así, el pueblo entero generaba respeto y obediencia hacia su máxima autoridad, que venía de una misma familia… ¡Los gobernantes no podían venir jamás de una familia diferente!
Se creía que ellos tenían comunicación directa con los dioses, por lo que más que una figura de respeto, se les consideraba también una figura sagrada. La pirámide social maya tenía como máxima figura a los reyes.
Características políticas de los mayas
¿Cómo se iniciaba el reinado maya?
Para comenzar con la gobernatura, el futuro regidor tenía que ser parte de la realeza directa de los dioses: los que se consideraban familia directa de sus deidades, obtenían en automático el título para comenzar a gobernar.
Sin embargo, para comenzar con esta misión era necesario que sucediera una iniciación, tras la cual se preparaba al líder para enfrentarse a las obligaciones y responsabilidades de manejar un pueblo.
Entre los diferentes rituales de preparación de príncipe, se encontraba realizarle una flebotomía durante la infancia, generalmente cerca de los seis años de edad, lo cual consistía en la evacuación de una determinada cantidad de sangre. Un acto que contenía bastante simbolismo dentro de sí, y ayudaba a forjar al príncipe mientras haciéndolo apto para sus futuras asignaturas.
También, entre dichos rituales, se habla de captura de prisioneros, y de peleas con los rivales de culturas vecinas. Todo esto se suponía que curtiría al futuro gobernante, y le daría las armas en personalidad y habilidades para realizar un buen trabajo rigiendo al pueblo. La pirámide jerárquica maya debía estar coronada por un gobernante fuerte y bien entrenado.
¿Cómo estaba distribuido el poder en el territorio Maya?
Debido a que todo el dominio no se concentraba en un solo punto, la distribución del poder se derivaba hasta alcanzar casi siempre a los familiares de los reyes. El rey, o jefe máximo, se dedicaba a regir las ciudades grandes, y los pueblos aledaños de menor tamaño estaban gobernados por familia directa del rey, o por la nobleza, los cuales eran básicamente familias de comerciantes con mucho poder económico. ¿Cómo se organizaron políticamente los mayas? Vamos a echar un vistazo:
La organización estaba dispuesta en el siguiente orden:
Drásticos métodos de control popular
Para mantener una sociedad bajo el yugo de sus gobernantes, generalmente las acciones más radicales son las que producen un efecto inmediato y total. En el caso de los mayas, ellos procuraban castigos fuertes ante las desobediencias: de esta manera, el pueblo obedecería a ojos cerrados. La politica de la cultura maya era radical.
Confiando en que los monarcas tenían una relación directa con las deidades, la forma de controlar a las masas era a través de la violencia, derivada más tarde en los famosos sacrificios humanos, los cuales, además de ser parte frecuente de ritos en los centros ceremoniales, durante mucho tiempo funcionaron perfectamente como un control político de dominación social.
Roles en el aspecto político Maya
Las principales figuras políticas en la pirámide de la sociedad maya estaban dispuestas de la siguiente manera:
- Reyes: la máxima autoridad para el pueblo, y, como se ha mencionado antes, eran casi sagrados, ante la creencia de provenir directamente de las deidades. Se creía que ellos podían mantener comunicación directa con los dioses, y se les atribuían ciertos poderes extraordinarios. Algunas veces se les inmortalizaba en esculturas y se les rendía tributo después de muertos.
Se le llamaba Halach uinic, que en su traducción significa “hombre verdadero”. Al tener el poder máximo, era el encargado de designar a los siguientes delegados: Ah Holpop (delegado político-religioso vigilante de calendarios, libros sagrados y educación de los mayas), al Nacom (capitán del ejército general), el Ahuacán (el máximo sacerdote) y el Tulipes (guardianes, los cuales vigilaban que las cosas se cumplieran bajo los estatutos de la ley.)
Así que el jefe máximo se apoyaba en estas segregaciones de poder político para dominar al pueblo. Los mayas creían en una dominación total de su gente, por lo que se encontraban sometidos a la ley de sus superiores, obedeciendo sus mandatos de manera ciega y abnegada. Toda la confianza del pueblo se encontraba en ellos.
- Nobleza. Se trataba de un consejo completo que apoyaba y limitaba el poder del gobernante principal. Entre sus personalidades se encontraban los líderes de ejércitos, quienes tenían un peso grande en las decisiones que se tomaban; también se encontraban los asesores y consejeros provenientes de otros territorios, o las personas con más poder económico: los comerciantes.
- Sacerdotes: la religión estaba estrechamente relacionada con el poder. Tanto así, que los sacerdotes tenían la facultad de decisión en cuanto a decidir quién ocuparía el lugar del próximo rey en caso de que no existieran descendientes directos del anterior monarca. Los sacerdotes también eran los encargados para elegir las fechas de ceremonias religiosas más importantes: tenían bastante voz y voto en decisiones importantes. El nombre del máximo sacerdote era Ahuacán, y los Ah Holpop eran los encargados de las fiestas religiosas.
- Militares. Cada ciudad contaba con su Nacom, el líder militar. Eran los encargados de convocar al ejército y liderar batallas importantes.
- Administradores. Eran los encargados de los asuntos administrativos de la ciudad: recaudar impuestos y supervisar los manejos internos. Contaban con consejos liderados por los Ah Cuch Cabob, acompañados por ayudantes mensajeros: los Kuleloob. En esta misma clasificación podemos considerar a los Batabs, quienes supervisaban al grupo de alguaciles que velaban por la paz del pueblo, llamados Tupiles.
- Artesanos, campesinos y esclavos. Era el resto de la población, quienes eran dominados por el círculo poderoso mencionado anteriormente. Ninguna de estas clases tenía poder político, pero eran los encargados de producir y hacer crecer la economía del pueblo. La organización económica de los mayas se sostenía mediante la producción agrícola principalmente, y el comercio que se realizaba por tierra y mar, vendiendo productos de origen agrícola, pesca, caza y recursos minerales.